TL;DR

  • Las afirmaciones “pre-Clovis” de mediados de siglo (Sandia, Tule Springs, Lewisville, Sheguiandah, Old Crow, Calico, Hueyatlaco, Pikimachay, Pedra Furada, Yuha, etc.) colapsaron en su mayoría ante una mejor estratigrafía, tafonomía y geocronología. Véanse las síntesis de Waters & Stafford (2007) y Goebel et al. (2008); Meltzer (2009).
  • Modos de falla recurrentes: depósitos mezclados o retrabajados, “geofactos”, carbón/hueso contaminado, tipología endeble y atajos en la publicación.
  • El “sistema inmune” de la disciplina endureció el modelo Clovis-primero no solo por dogma, sino porque los datos eran malos—hasta que unos cuantos sitios (Meadowcroft, Monte Verde) cumplieron estándares modernos y una base de evidencia más amplia (genética, paleoecología) convergió. Investigación en Meadowcroft; Dillehay et al. (2008); Rasmussen et al. (2014).
  • Los avances posteriores a 1990 (p. ej., Buttermilk Creek; huellas de White Sands) consolidaron una cronología de poblamiento más temprana y mostraron por qué la disciplina fue con razón cautelosa durante décadas. Jenks (2010); Waters et al. (2011); Holliday et al. (2011).

“La gran tragedia de la ciencia: el asesinato de una hermosa hipótesis por un feo hecho.”
— T. H. Huxley


Los expedientes del caso: afirmaciones de mediados de siglo que no se sostuvieron#

La búsqueda de sitios pre-Clovis en la arqueología del siglo XX produjo una galería de sitios problemáticos. A continuación reconstruyo qué se afirmó, qué mostraban realmente los datos y por qué fracasaron las afirmaciones, con la mira puesta en los patrones que explican la persistencia del modelo Clovis-primero.

Cueva Sandia (Nuevo México)#

Afirmación. En las décadas de 1930–40, Frank Hibben reportó “puntas Sandia” por debajo de Folsom y de fauna extinta—más antiguas que Clovis.
Evidencia. Secuencia estratigráfica con una capa de ocre; artefactos por debajo de restos faunísticos en la narrativa clásica.
Problemas. Estratigrafía inconsistente; procedencias faltantes o ambiguas; acusaciones posteriores de siembra de materiales y métodos irregulares. El mejor relato único de la controversia es el reportaje de Douglas Preston, “The Mystery of Sandia Cave” (1995), junto con síntesis posteriores. Estatus: no aceptado como pre-Clovis. Preston (1995); Sandia Cave Wikipedia.

“Big Dig” de Tule Springs (Nevada)#

Afirmación. Las excavaciones masivas de 1962–63 buscaron asociación humano–megafauna en la Formación Las Vegas del Pleistoceno.
Evidencia. Zanjas profundas, estratigrafía de “black mat”, lasca de obsidiana en contexto pleistocénico.
Problemas. Ningún artefacto seguro en contexto primario; revisiones estratigráficas posteriores. Véase la síntesis del NPS sobre el Big Dig y el trabajo estratigráfico de Haynes del USGS. Estatus: no se ha demostrado una ocupación pre-Clovis aceptada. NPS Big Dig Report; Haynes (1965).

Lewisville (Texas)#

Afirmación. Hogares y herramientas ≳37 ka; los periódicos proclamaron al “Hombre de Texas”.
Evidencia. Carbón y líticos en terrazas del río Trinity.
Problemas. Carbón retrabajado, contextos equívocos; trabajos posteriores redujeron o rechazaron las edades pleistocénicas. Véase el resumen de la Texas State Historical Association. Estatus: no pre-Clovis. Johnson (1987).

Sheguiandah (Isla Manitoulin, Ontario)#

Afirmación. Thomas E. Lee argumentó niveles Paleoindios+ en depósitos tipo till, posiblemente muy antiguos.
Evidencia. Líticos estratificados; los primeros informes sugerían gran antigüedad.
Problemas. Contextos glaciares/perturbados; síntesis posteriores sitúan los materiales clave en el Holoceno o como ambiguos. Véase la monografía The Sheguiandah Site (2002). Estatus: no aceptado como pre-Clovis. [^oai1]

Cuenca de Old Crow (Yukón)#

Afirmación. Huesos pleistocénicos “trabajados” (incluyendo un alisador de caribú) que implicarían una presencia humana muy temprana.
Evidencia. Patrones de fractura ósea; identificaciones tipológicas.
Problemas. Ambigüedad tafonómica; un “artefacto” clave fue redatado mediante AMS al Holoceno tardío (~1.26 ka), anulando la afirmación pleistocénica. Véase la actualización en Alaska Journal of Anthropology sobre la redatación del alisador de Old Crow. Estatus: la afirmación colapsó. 1

Sitio de Hombre Temprano de Calico (California)#

Afirmación. Louis Leakey (años 1960) argumentó la presencia de “artefactos” en depósitos ≳100 ka.
Evidencia. Enormes colecciones de piedras lascadas.
Problemas. “Geofactos” producidos por procesos naturales; ausencia de secuencias de remontaje seguras; las edades de los sedimentos anteceden a Homo sapiens en las Américas por órdenes de magnitud. Para una historia concisa de la controversia (y críticas clásicas como Haynes 1973), véase el artículo de Dempsey en las Actas de la SCA, “Calico: The Lightning Spall Site”. Estatus: no arqueológico. 2

Hueyatlaco / Valsequillo (Puebla, México)#

Afirmación. Herramientas de piedra en depósitos datados por series de U a ≥250 ka (!).
Evidencia. Conjuntos de artefactos reportados; edades radiométricas en sedimentos/tefras.
Problemas. Fuertes discordancias estratigráficas/geomórficas; las fechas se aplican a las camas, no al emplazamiento de las herramientas; ausencia de un conjunto cultural coherente. Véase la síntesis en S. González et al., 2006. Estatus: abrumadoramente rechazado. 3

Pikimachay (Ayacucho, Perú)#

Afirmación. MacNeish propuso ocupaciones de ≥20 ka; los críticos calificaron los “instrumentos” más antiguos como geofactos.
Evidencia. Líticos y huesos de los estratos h–k.
Problemas. Conjuntos mezclados, fracturación natural; reevaluaciones recientes aceptan con cautela la modificación humana principalmente para niveles más jóvenes del Pleistoceno tardío/Holoceno y no para las edades más extravagantes. Véase el nuevo estudio tafonómico en BMSAP (2018). Estatus: las afirmaciones tempranas se recortaron; los horizontes del Pleistoceno tardío son plausibles, el resto dudoso. 4

Pedra Furada / Serra da Capivara (Piauí, Brasil)#

Afirmación. Complejos de abrigos rocosos con hogares/líticos de 30–50 ka.
Evidencia. Carbón, rasgos quemados, herramientas de canto rodado.
Problemas. Incendios naturales, geofactos y formación del sitio complican las afirmaciones; trabajos posteriores proponen secuencias pleistocénicas con artefactos, pero persiste el escepticismo. Para posturas a favor y en contra, véanse Boëda et al. (2014) sobre Vale da Pedra Furada y la reevaluación de Parenti (2023). Estatus: aún en disputa; no decisivo para un poblamiento pre-LGM. 5 6

Esqueletos “pleistocénicos” (California: Yuha, Del Mar, Sunnyvale, etc.)#

Afirmación. Restos humanos datados (por métodos tempranos) en el Pleistoceno tardío.
Evidencia. ^14C convencional, racemización de aminoácidos, series de U.
Problemas. Contaminación y límites metodológicos; ^14C AMS sobre colágeno mostró edades holocénicas. Véase Stafford et al., Nature (1984) sobre el entierro de Yuha; véanse también las correcciones por series de U y AMS para Del Mar/Sunnyvale. Estatus: no pleistocénicos. 7 8


Panorama comparativo#

Sitio (país/estado)Edad alegada (mediados de siglo)Evidencia principalModo de falla principalEstatus actual
Cueva Sandia (US-NM)≥25 ka“Puntas Sandia” estratigráficasAmbigüedad estratigráfica; acusaciones de siembraRechazado como pre-Clovis 9
Tule Springs (US-NV)≥PleistocenoZanjas del “Big Dig”, black matSin contexto humano seguroNo pre-Clovis 10
Lewisville (US-TX)≥37 kaHogares + líticosCarbón retrabajado/tafónomicamente problemáticoRechazado como pre-Clovis 11
Sheguiandah (CAN-ON)Paleoindio–más antiguoLíticos en depósitos tipo tillPerturbación glacial; contextos mezcladosNo pre-Clovis [^oai1]
Old Crow (CAN-YT)PleistocenoHuesos “trabajados”Mal identificados; redatación por AMSColapsado (Holoceno tardío) 1
Calico (US-CA)≥100 kaPiedras lascadasGeofactos; edades imposiblesRechazado 2
Hueyatlaco (MX-PUE)≥250 kaHerramientas + edades por series de UEdades de cama ≠ edades de artefactos; caos estratigráficoRechazado 3
Pikimachay (PE-AYA)14–25 ka (se alegan más antiguas)Líticos + huesosFractura natural; depósitos mezcladosRecortado a horizontes más jóvenes 4
Pedra Furada (BR-PIA)30–50 kaCarbón, cantosIncendios naturales/geofactosEn disputa; sin consenso pre-LGM 5 6
Yuha/Del Mar/Sunnyvale (US-CA)20–70 kaHueso humanoContaminación; problemas con AARAMS: Holoceno 7 8

Por qué estas afirmaciones fracasaron (y se endureció Clovis-primero)#

  1. Estratigrafía y formación de sitio. Muchos niveles “más bajos que Clovis” eran palimpsestos: pavimentos deflacionados, lags coluviales o rellenos de cárcavas. Sin microestratigrafía, remontajes y rasgos sellados, cualquier lítico por debajo de Clovis parece más antiguo por defecto. (Compárese el fetichismo por los perfiles de zanja de los años sesenta con la micromorfología en lámina delgada y los paquetes de OSL actuales.) La historiografía de Meltzer sigue siendo esencial: “Why Don’t We Know When the First People Came to North America?” (American Antiquity, 1989), y su libro First Peoples in a New World. 12 13

  2. Geofactos y proyección tipológica de deseos. Calico enseñó al campo cuán entusiastamente la naturaleza talla piedra. El pisoteo experimental, las fracturas por rayos y la rotura mecánica produjeron “núcleos” y “lascas” tipo Calico—sin una chaîne opératoire de remontajes. La reseña de Dempsey traza esta evolución de manera sucinta. 2

  3. Relojes defectuosos. La racemización de aminoácidos temprana y el ^14C convencional sobre colágeno/carbón contaminado produjeron edades “pleistocénicas” espurias. El ^14C AMS sobre fracciones limpias—y series de U independientes—torpedearon los esqueletos clásicos de California y Yuha. Véanse Stafford et al., Nature (1984); Bischoff et al., Science (1981). 7 8

  4. Publicación y retórica. Varias afirmaciones aparecieron primero en conferencias de prensa, revistas de divulgación o literatura gris institucional, con datos que se publicaban a cuentagotas—dejando a los críticos la tarea de hacer la síntesis (y el daño). El ensayo de Meltzer de 1989 documenta la sociología de cómo se libraron estos debates. 12

  5. Respuesta inmune disciplinaria. Tras una serie de falsos positivos, el listón se elevó (con razón): contextos sellados; agencia humana clara (remontajes, secuencias de reducción, uso de hueso/plantas, huellas de uso, rasgos); geocronología coherente con métodos convergentes; y archivos auditables por pares. El consenso “Clovis-primero” persistió porque la mayoría de los contraejemplos eran débiles en estos aspectos, no porque los arqueólogos fueran incapaces de imaginar un poblamiento más temprano. Para una síntesis, véase Goebel, Waters & O’Rourke (2008). 14


Qué finalmente rompió el modelo

Meadowcroft y Monte Verde: método, no mito#

Abrigo rocoso Meadowcroft (Pensilvania). Componentes datados hasta ~16 ka (cal BP), microestratigrafía intacta, cuidadosa descontaminación de contaminantes bituminosos y una defensa paciente, durante décadas, en las revistas. Véase Adovasio et al., “Two Decades of Debate” (PDF de archivo). Estatus: ampliamente aceptado como pre-Clovis. 15

Monte Verde II (Chile). Conservación rica en orgánicos y anegada—estructuras, artefactos perecederos, algas marinas—además de sellado estratigráfico y una “visita de jurado” en 1997 que convenció a los escépticos; trabajos más recientes ajustan la edad de sellado a ~14,550 cal BP. Véanse Pino et al., Antiquity (2023) y Dillehay et al., PLOS One (2015). 16 17

Los años 2010: escala y convergencia#

Buttermilk Creek / sitio Debra L. Friedkin (Texas). Un gran conjunto lítico pre-Clovis (15.5–13.2 ka) subyace a Clovis, con datación por luminiscencia estimulada ópticamente y estratigrafía íntegra. Véase Waters et al., Science (2011). 18

Huellas de White Sands (Nuevo México). Rastros humanos interestratificados con sedimentos lacustres datados por múltiples métodos (incluyendo radiocarbono en semillas de Ruppia contrastado con fracciones alternativas) a ~23–21 ka; trabajos de seguimiento abordaron efectos de reservorio. Véanse Bennett et al., Science (2021) y Dempsey et al., Nat. Ecol. Evol. (2023). 19 20

Síntesis de conjunto. A medida que maduraron los protocolos de radiocarbono y se acumularon sitios, Clovis se estrechó a ~13.1–12.6 ka, dejando de ser “primero”. Véanse Waters & Stafford (2007) y la revisión más amplia en Goebel et al. (2008). 21


Lecciones aprendidas (para no repetir los años cincuenta)#

  • Contexto por encima de objetos. Una hermosa bifaz en una estratigrafía basura no prueba nada. El sellado seguro, los remontajes y la micromorfología superan siempre a la tipología.
  • Múltiples relojes independientes. ^14C AMS en fracciones químicamente aisladas, series de U cuando proceda, y OSL/IRSL para sedimentos—preferiblemente convergentes.
  • Definir la agencia humana de forma positiva. Secuencias de reducción, huellas de uso con función confiable, rasgos (hogares, postes) y áreas de actividad; cuidado con los geofactos y las firmas de combustión natural.
  • Publicar conjuntos de datos completos. Permitir que los críticos repliquen tus estadísticas y tu estratigrafía. Los sitios que sobrevivieron (Meadowcroft, Monte Verde) hicieron exactamente eso.

Preguntas frecuentes#

P1. Entonces, ¿alguna afirmación “pre-Clovis” de mediados de siglo se sostiene hoy?
R. Esencialmente no. Algunas regiones (p. ej., Serra da Capivara; partes de Perú) siguen publicando horizontes pleistocénicos, pero las afirmaciones de mediados de siglo más famosas (Sandia, Calico, Hueyatlaco, Lewisville) siguen sin ser aceptadas como pre-Clovis porque los contextos no cumplen los estándares modernos. 2

P2. ¿Qué hay de una ocupación realmente temprana (>20 ka)?
R. Las huellas de White Sands proporcionan una fuerte evidencia de presencia humana ~23–21 ka; las afirmaciones más tempranas requieren un contexto al nivel de Monte Verde y dataciones convergentes para convencer a la mayoría de los arqueólogos. 19 20

P3. ¿Persistió “Clovis-primero” principalmente por razones ideológicas?
R. La ideología coloreó la retórica, pero el método explica la mayor parte: tras una serie de falsos positivos, el listón se elevó. Cuando los sitios cumplieron ese listón (Meadowcroft, Monte Verde) y los datos independientes convergieron, el modelo cambió. Véanse Meltzer (1989; 2009) y Goebel et al. (2008). 12 13 14

P4. ¿Cuál es el rango de edad canónico para el propio Clovis?
R. Aproximadamente ~13.1–12.6 ka (cal BP), con base en un conjunto depurado de fechas de radiocarbono. Véase Waters & Stafford (2007). 21

P5. ¿Qué único rasgo diagnóstico debería hacernos menos crédulos la próxima vez?
R. Secuencias de reducción remontadas a través de microestratos sellados, con datación ortogonal—porque la naturaleza no talla núcleos en orden ni los acomoda bajo un hogar.


Notas al pie#


Fuentes#

  • Adovasio, J. et al. “Two Decades of Debate on Meadowcroft Rockshelter.” (PDF de archivo) reseña en Science & Archaeology (s. f.). Enlace en Archive.org.
  • Bennett, M. R., et al. “Evidence of humans in North America during the Last Glacial Maximum.” Science 374 (2021): eabg7586. artículo. 19
  • Bischoff, J. L., et al. “Uranium series dating of human skeletal remains from the Del Mar and Sunnyvale sites, California.” Science 213 (1981): 1003–1005. Entrada USGS. 8
  • Dempsey, D. “Calico: The Lightning Spall Site.” SCA Proceedings 22 (2009). PDF. 2
  • Dillehay, T. D., et al. “New archaeological evidence for an early human presence at Monte Verde, Chile.” PLOS One 10 (2015): e0141923. acceso abierto. 17
  • Dillehay, T. D. “Monte Verde: Seaweed, Food, Medicine, and the Peopling of South America.” Science 320 (2008): 784–786. (Contextual) Entrada en ResearchGate. 22
  • Goebel, T., Waters, M. R., O’Rourke, D. H. “The late Pleistocene dispersal of modern humans in the Americas.” Science 319 (2008): 1497–1502. PubMed. 14
  • González, S., et al. “Valsequillo (Hueyatlaco) Pleistocene archaeology and dating.” World Archaeology 38 (2006): 611–627. Resumen en T&F. 3
  • Meltzer, D. J. “Why Don’t We Know When the First People Came to North America?” American Antiquity 54 (1989): 471–490. Resumen en Cambridge. 12
  • Meltzer, D. J. First Peoples in a New World (2ª ed.). Univ. of California Press, 2009/2021. editorial. 13
  • National Park Service. “The Geology and Paleontology of Tule Springs Fossil Beds.” Hoja informativa (2018). PDF. 10
  • Pino, M., et al. “Monte Verde II: an assessment of new radiocarbon dates and their sedimentological context.” Antiquity 97 (2023). artículo. 16
  • Preston, D. “The Mystery of Sandia Cave.” The New Yorker (12 de junio de 1995). artículo. 9
  • Stafford, T. W., et al. “Holocene age of the Yuha burial: direct radiocarbon determinations by accelerator mass spectrometry.” Nature 308 (1984): 446–447. PubMed. 7
  • Texas State Historical Association. “Lewisville Site.” entrada. 11
  • Waters, M. R., Stafford, T. “Redefining the Age of Clovis.” Science 315 (2007): 1122–1126. Science. 21
  • Waters, M. R., et al. “The Buttermilk Creek Complex and the Origins of Clovis at the Debra L. Friedkin Site, Texas.” Science 331 (2011): 1599–1603. PubMed. 18
  • Seguimiento de White Sands: Dempsey, M., et al. “Age of the human footprints from White Sands National Park, New Mexico.” Nat. Ecol. Evol. (2023). artículo. 20
  • Julig, P. J. (ed.). The Sheguiandah Site: Archaeology and History of a Manitoulin Island Locality. (Mercury Series). 2002. Listado de acceso abierto. [^oai1]
  • Haynes, C. V. “Quaternary geology of the Tule Springs area, Clark County, Nevada.” USGS Prof. Paper (1965). PDF. 23
  • Krasinski, K., Haynes, C. V. “Old Crow Caribou Flesher Redating.” Alaska Journal of Anthropology (2010). PDF. 1